domingo, 27 de marzo de 2011

¿y este maje por qué sigue publicando?

Recién leí la última entrada del blog. Era grande la expectativa del nuevo gobierno, el gobierno del cambio, el primero de la izquierda, en fín, el primero de Funes.

Como era de esperarse, por lo menos los que me conocen un poco lo intuían, el falso retorno de esa entrada del 2009 no iba a llegar lejos. El 2010 fue un año para el olvido, personalmente fueron 365 días de estancamiento, de no saber que hacer. Sigo sin tenerlo claro.

Aún así, sin lograr que los parrafos fluyan, sin cadencia, sin estructuras claras, tengo que escribir más, me lo debo a mi mismo. Por lo menos en la decadencia, voy a tratar de llevar un blog exitoso sobre mis pocos logros.

De la nada vienen las oportunidades. Pero que forma más encajonada, maricona y reprimida que tengo de escribir, como si me diera pena decir las cosas. Si por lo menos me diera pena, pero es la indiferencia y la apatía por las cosas lo que no me deja estar.

De regreso a las oportunidades. En este año raro, menos prometedor que el pasado. Estoy, por primera vez en mucho tiempo emocionado con un proyecto. Con varios amigos, estamos en el proceso de formar una ONG, El Salvador 180°. El proyecto insignia de este año es un documental. Uno donde los jóvenes de una comunidad en riesgo son los protagonistas y los productores, un proyecto de ellos en donde solo los vamos a dirigir.

Solo esto, la capacidad de darle voz para que alguien cuente su historia, es lo que me mantiene con ganas. Estoy haciendo el último ciclo en la universidad de una carrera que debía haber terminado hace mucho, ni siquiera eso se compara a lo del documental. Ni debería emocionarme llevar tanto tiempo en la universidad.

En general hay avances, siguen siendo escasos pero ahí están. Para un medio hermitaño como yo esto puede ser un poco desorbitante, así como deben sentir las avispas que entran a mi cuerto y luego no pueden salir porque están en el lado de la ventana donde no se abre. Si pudiera explicarles, si no fuera alérgico, si no me costara trabajar con muchas personas, si me importaran los demás.

Hoy tenía la intención de escribir sobre "No country for old men". Pero no, salió esta sextadécima, una aberración inexplicable. En fín, ahorrense la molestía y vena más westerns